Brillante poeta, difusor cultural y gran  persona, Francisco Mena Cantero reside muchos años en Sevilla junto a  Juana, su cariñosa mujer manchega. Allí viven también sus dos hijos y  tres nietas. Pero nunca olvida sus raíces ciudadrealeñas y, siempre que  puede, un Ave lo transporta veloz a la “capitaleja”, cada vez distinta,  donde transcurrió su juventud.
  Aquí conserva familiares, amigos y  muchos compañeros, artistas y poetas, entre los que destacan los  componentes del Grupo Literario Guadiana, donde participa desde su  creación en 1975. Por ello, la dirección actual ha tenido la feliz idea  de dedicar a su valiosa narrativa (inédita hasta hoy) el nº 22 de la  colección bibliográfica, cuando se cumplen 35 años del primer número de  la revista Manxa.
   “El Cristo de Salomón y otras historias” está  formado por 11 relatos cortos, 9 de los cuales no superan dos o tres  páginas. El primero (su título coincide con esta publicación) obtuvo el  Premio Hucha de Plata (Madrid, 1988); y el segundo, “El caballo”,  consiguió en 1997 el 2º Premio Ciudad de Peñíscola.
   Francisco Mena  Cantero, más conocido como poeta, crítico literario y colaborador  habitual de Lanza, que define sus relatos de historias con influencias  autobiográficas, donde conviven ficción y realidad, demuestra en todos  ellos un perfecto dominio del lenguaje, transformado en voces cultas y  dichos de raíz popular. El resultado es una prosa muy cuidada, de  notable lirismo, donde leyendas, diferentes tradiciones populares y  sucesos ocurridos a los protagonistas (ligados por hilos invisibles),  desde la profunda reflexión que suscitan, alientan mensajes  decisivamente propicios para fortalecer la autoestima personal.
    Noche de San Juan, El canario (Historia para muy pocos), El maestro,  Cristobalito: inquietudes, sentimientos, fantasmas que nos unen durante  la niñez y recuerdan quiénes somos y que nuestra fuente de luz radica en  el amor, la verdadera entrega: “Ni siquiera sabes si ha sido un  milagro; o es algo que ha ocurrido en una de las orillas del sueño,  donde las cosas que pensamos imposibles no lo son, como la vida cuando  parece que se nos para, porque alguien muy querido acaba de morir, y de  pronto resulta que todo es un mal sueño y es verdad, y no existe la  muerte todavía, y parece imposible que sea posible lo que vemos.”
    Muchas veces reconocemos que la vida es una pesada carga, porque nos  golpean sin piedad sensaciones de fracaso, pérdidas irreparables,  sufrimientos difíciles de superar. Francisco Mena Cantero dirige  sabiamente sus palabras, invitándonos a sentir inocentes “pellizcos en  el alma”, que pueden ayudarnos a superar las mayores dificultades,  encontrar soluciones para cosas imposibles y conocer nuevos caminos.
Inteligencia  y sentido común conducen estas historias, sobre todo costumbristas,  pero también universales, cuyo autor las sustenta sobre conceptos  transcendentes. Si miramos a nuestro interior, núcleo de soledad, sin  perder nunca la esperanza, lograremos metas que parecían inalcanzables.  Con amor y constancia, los problemas consiguen resolverse. El  pensamiento lógico revela que “la mejor forma de vencer las situaciones  negativas, es actuar siempre de manera positiva”.
1 comentarios:
Hola José María! Acabo de ver tu comentario, en mi blog, acerca de Montesinos, de lo que pedro te contó y de tus buenos deseos para el 2011.
Muchas gracias por todo. Espero y deseo que te recuperes pronto y que este 2011 que llega te sea propicio.
Un gran abrazo poeta amigo.
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